El Colegio de Ingenieros Civiles de La Laguna señaló que hoy en día es una realidad que el gobierno toma decisiones donde la injerencia de la sociedad civil está ausente, como es el caso de Agua Saludable para La Laguna.
Daniel de la Garza Ferrer, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles, dijo que, a causa de esta falta de socialización, existe un retraso con respecto a lo programado, unilateralidad en la participación de empresas contratistas tanto en la ejecución como en supervisión, incertidumbre con respecto a las obrascomplementarias como la adecuación de la red de distribución y construcción de plantas de saneamiento, falta de socialización con respecto a los costos hacia los usuarios en tarifas una vez terminada la obra, desconocimiento sobre un programa de beneficio social, es decir, que zonas serán las primeras que se abastecerán y así progresivamente, además de una falta de comunicación sobre los alcances sobre el producto terminado, si solo será para uso potable o también llegará a jardines, empresas para sus procesos industriales, agrícolas, ganaderos.
“Solo el élite del Poder Federal y sus distintos brazos, en este caso, Conagua, son los únicos que determinan el rumbo de dicha obra cuando los usuarios y destinatarios son los ciudadanos laguneros”, expresó.
Por lo anterior, indicó que el Colegio de Ingenieros Civiles de la Laguna cuestiona si no es congruente que los especialistas de la Laguna sean los más apropiados para encauzar el proyecto, supervisarlo y adecuarlo según las necesidades intrínsecas de la región, pues detalló que, por no tomar en consideración al personal especialista de la región, llámense ingenieros, economistas, geólogos, químicos, agrónomos, entre otros, los resultados son precisamente los mencionados que prevalecen en esta obra.
“Un factor muy importante para que esto siga sucediendo, independientemente del tinte partidista, que se tenga es que el poder de estas decisiones y acciones en cuanto a obra pública recae solo en el seno político, en su mayoría deficientes de información técnica o determinante para la operatividad óptima de un proyecto”, dijo.
Sin embargo, en un análisis autocrítico, dijo que lo han permitido los ciudadanos, que aplauden lo que hace este sector y no intervienen directamente, por ello es sumamente relevante que, dentro de posibles iniciativas de Ley, se propongan a los líderes de los organismos civiles especialistas en los distintos rubros que atañen las decisiones que determinan el cauce de una sociedad, es decir, ingenieros civiles, abogados, fiscalistas, contadores, ambientalistas, economistas, y demás.
“Hacemos un llamado a la sociedad y a los medios de comunicación para que ya no seamos solo unos espectadores y solicitantes externos de participación en las obras, sino que luchemos por ingresar y ser parte del círculo donde se toman las decisiones, es decir, en las Cámaras de diputados y senadores, y propongamos una Ley que obligue a que ciudadanos representantes de organismos locales, estructurados adecuadamente y con especialidades que coadyuven en el progreso integral de una sociedad sean parte en estas cámaras y no solo los actores políticos, que la mayoría de las veces desconocen los temas en cuestión”, comentó.